sábado, 11 de junio de 2016

Photo
CreditJohn Rooney/Associated Press
Nunca bajes los brazos. No mantengas la barbilla arriba o te eches hacia atrás cuando trates de evitar un golpe ni dejes que tu oponente te arrincone en una esquina.
Son algunos de los rudimentos básicos del boxeo, las primeras lecciones que un entrenador le enseña a un principiante.
Muhammad Ali desafió todas esas convenciones. Era atrevido con las palabras, pero su manera de pelear fue aún más audaz: los brazos abajo, cabeza arriba, bailaba y retaba a su oponente a acercarse.
Mientras todo el mundo recuerda a Ali, quien falleció el viernes pasado, por ser un titán social y cultural, también vale la pena recordarlo por su destreza sin precedentes dentro del ring, lo que le ofreció la plataforma para convertirse en una de las figuras más populares e influyentes del planeta.
Ali apareció en la escena del boxeo hace más de 50 años como campeón olímpico de peso semipesado, bien formado pero desgarbado.
Ya como profesional, definió rápidamente un estilo de bailarín de tap, veloz como el rayo, que estableció los límites de lo que un peso pesado podía hacer. Era casi como si Shaquille O’Neal driblara como Stephen Curry.
“Introdujo un agilidad, movilidad y velocidad poco vistas en la categoría de peso pesado”, dijo Naazim Richardson, entrenador de varios campeones mundiales. “En realidad fue Dios quien lo entrenó; los demás simplemente ayudamos”.
Ali terminó su carrera con 56 combates ganados y solo cinco perdidos. Muchos boxeadores han tratado de imitarlo e incorporar elementos de su estilo a su arsenal. Pero Ali era tan heterodoxo que nadie ha logrado hacerlo como él.
Aquí echamos un vistazo más cercano a los detalles que lo hicieron un gran boxeador.
  1. Photo
    Los pies de Muhammad Ali lo ayudaron a esquivar este golpe de Joe Frazier en 1971.CreditLarry Morris/The New York Times
    SUS PIES
    Adelante y atrás, adelante y atrás. Ali tijereteaba con sus pies. Parecía un movimiento inocuo, pero el barajeo, como se conoció después a su movimiento de pies, fue lo que le dio efectividad.
    “Mientras lo veías bailar, te caía una combinación de cuatro o cinco golpes”, dijo Bernard Hopkins, excampeón mundial de peso medio sobre los rivales de Ali. “Y después tratabas de descifrar cómo un tipo pudo utilizar una táctica que nada tiene que ver con el boxeo, el barajeo de Ali, y hacerlo efectivo.
    Eso es lo que seguramente pensaba Cleveland Williams mientras Ali lo destrozaba en tres asaltos en una pelea de 1966 que muchos expertos califican como la mejor pelea de Ali de todos los tiempos. En un momento del primer asalto, Ali barajeó los pies hacia adelante y hacia atrás dos veces en el centro del cuadrilátero. Williams parecía congelarse al mismo tiempo que Ali le recetaba una ráfaga de golpes de derecha e izquierda.
    Esos pies rápidos también eran su mejor arma defensiva. Si su rival le entraba a la distancia, sus pies lo ayudaban a huir rápidamente. El abecé del boxeo dice que para evitar las embestidas, un boxeador debe moverse hacia atrás y hacia los lados, pero nunca directamente hacia atrás. Ali no necesariamente seguía las reglas.
    Tal fue el caso en el primer asalto de la pelea contra Williams cuando parecía tenerlo esquinado hasta que Ali tiró un gancho al estómago y con el mismo brazo rápidamente tiró otro a la cabeza mientras se movía hacia atrás. Cuando Williams trató de reaccionar con un volado de derecha, Ali ya había huido de puntillas y todavía le tiró otro gancho a la cabeza para más seguridad.
  2. Photo
    Muhammad Ali golpea a Sonny Liston en la cara durante una pelea en 1964. CreditAssociated Press
    SUS MANOS
    Ali no fue el boxeador con el golpe más potente, pero tenía mucho alcance; era rápido y persistente con las manos, y cansaba al oponente antes de tratar de noquearlo.
    “Su gancho es probablemente el golpe que lo convirtió en campeón”, dijo Freddie Roach, un entrenador del Salón de la Fama del Boxeo. “Cuando encuentras la distancia en la que puedes conectar tus mejores combinaciones y tu golpe de poder, el gancho es muy efectivo”.
    En el segundo asalto de su primera pelea contra George Chuvalo en Toronto en 1966, Ali le tiró un gancho de izquierda a la cabeza. Pero después, de la nada, Ali tiró otra vez con la izquierda y, como Chuvalo esperaba otro golpe de frente, soltó la izquierda otra vez en forma de gancho.
    Ali tiraba casi todos sus golpes a la cabeza, y eso le permitía estar fuera del alcance de sus rivales, pues ellos necesitaban acercarse para lanzar golpes al cuerpo”, dijo Roy Jones Jr., un excampeón de pesos medio y semipesado, quien trató de imitar la maestría de Ali en el ring.
  3. Photo
    Joe Frazier agarró a Muhammad Ali por la barbilla en el decimoquinto round de su primera pelea.CreditAssociated Press
    SU BARBILLA

    Los grandes boxeadores deben poder hacer más que tirar buenos golpes… deben aceptarlos también. Y algo de lo que casi nadie habla respecto de Ali es lo bien que aceptaba el castigo. Larry Holmes fue el único que pudo detener a Ali.
    Uno de los ejemplos más conmovedores de la quijada de hierro de Ali fue cuando Joe Frazier lo noqueó con un gancho de izquierda en el decimoquinto asalto de su primera pelea. Ali rápidamente se recuperó, aunque perdió la pelea por decisión.
    “Ese golpe hubiera tumbado el edificio completo”, dijo Ray Mancini, un excampeón ligero. “Yo dije: ¿Cómo puede alguien levantarse de un golpe como ese?”.
  4. Photo
    Muhammad Ali golpea a Ron Lyle con el puño derecho en su encuentro en 1975. CreditAssociated Press
    SU CUERPO
    Ali era esbelto, no voluminoso, y eso lo hacía tan rápido con los pies como con las manos. Sus reflejos eran tan fugaces que sus oponentes tenían miedo de estar dentro de su alcance. Eso era un error común de los rivales de Ali, que arremetían contra él con golpes sin entusiasmo que solo los dejaban vulnerables, dijo Holmes, un excampeón de peso pesado que le ganó a Ali en 1980, en la que fuera su antepenúltima pelea.
    “No puedes bailar despacio si no te acercas a la mujer”, dijo Holmes.
    Ron Lyle claramente no deseaba “bailar” con Ali ya en el undécimo asalto de su pelea en 1975. Después de un combate bastante parejo en el que aceptó mucho castigo en 10 asaltos, Lyle empezó a agitar sus brazos frente a sí mismo más como un empujo que como golpes. Después de 20 segundos así, Ali lo castigó con un gancho seguido de un recto de derecha que lo hicieron doblarse; fue el principio del fin de la pelea. El juez detuvo el combate unos segundos después cuando Lyle estaba arrinconado y ya no contestaba los golpes.

  5. Photo
    Muhammad Ali veía mientras le hacían el conteo a George Foreman en el octavo round de 'The Rumble in the Jungle'. CreditAssociated Press
    SU CEREBRO
    Ali era muy inteligente. Sabía dónde pararse, dónde moverse, cómo dictar una pelea en sus términos.
    “Era siempre muy agresivo y tenía mucho control sobre lo que pasaba en el cuadrilátero”, dijo Jones.
    Por ejemplo, esto fue lo que sucedió en el primer asalto de su primera pelea contra Sonny Liston en 1964. Liston era el favorito; era un toro. Había predicho que vencería a Ali en dos asaltos. Pero Ali se apoderó del combate en el primer asalto e impuso el tiempo y el ritmo; logró controlar la pelea. Liston no salió para el séptimo asalto.
    El ejemplo más famoso en que Ali fue más listo que su oponente fue en lo que entonces era Zaire en 1974 contra George Foreman. Ali le permitió golpes duros contra las cuerdas; lo cansaron tanto que Ali pudo noquearlo al final del octavo episodio.
  6. TOMADO DEhttp://www.nytimes.com/Y PUBLICADO EN: http://victorianoysocialist.blogspot.com/ y en Libertad Bermeja//Facebook

No hay comentarios:

Publicar un comentario